miércoles, 28 de noviembre de 2007

INAPTITUD

Esto no va de renfe, tampoco de funcionarios; va de esa gente en cualquier lugar que trabaja porque tendrá que hacer algo, a desgana, que no le gusta su trabajo o que no le gusta su vida, (o que han tenido un mal día, q luego me dicen q voy a saco), y lo demuestran con una irradiación de incompetencia que te deja ciego.
Mi caso particular: Un vendebilletes de renfe.
"¿A qué se deberá su incompetencia?- me preguntaba yo una vez acabado el episodio. ¿Se deberá al burrismo?, que les ponen dos cartones a los lados de los ojos para que sólo se fijen en su camino. ¿O se debe a que este personaje en concreto es algo hijo de su madre (y bastante hijo del padre de otro)? ¿Es el virus del funcionario? ¿O tienes miedo de soltar con tus palabras tu calor corporal y morir congelado? ¿A eso venían los sonidos guturales?"
Sólo acercarme a la taquilla, a las 8.15, me señala con ruiditos la máquina de tíquets.
-/Ruido/
-No tengo que comprar billete, tengo que validarlo.
- ¿Dónde váh?
-A Sevilla
- A las diéh y media el prósimo.
"Oh, maldición -pienso yo- ¿cómo habré mirado el horario?"
Pero como suelo fiarme más de mí que de los demás y a veces de ninguno, miré los horarios por mí misma. Y éstos me dijeron más que el señor funcionario de renfe con chaleco amarillo auto (¿alguien supo alguna vez, qué color es el amarillo auto del que hablan los libros de autoescuela?).
Y dijéronme los horarios:
-El próximo tren, el que tú estás esperando, no se va a parar en esta estación, pero sí en el Puerto de Santa María, que es la siguiente.
Así que volví a molestar al señor funcionario- cuánto-me-gusta- la-seguridad-de-mi-trabajo -pero-nada-más-de-él. (Pero molestar de verdad, que le acabé diciendo "pero no te enfades" por lo de los sonidos guturales que emitía a desgana y con soplidos en lugar de hablar y eso). Y entonces le pregunté cuándo pasaba el próximo a Puerto Santa María (que como es un cercanías, tiene mayor frecuencia (en vez de cada hora, cada cuarenta y cinco minutos).

Corolario1: Renfe no funciona especialmente mejor fuera de Barcelona.

Corolario2: Luego viene cuando alguien nos trata medianamente bien. Sólo como si fuéramos también personas. Vamos, haciendo lo que exige su puesto. Y nosotros nos sorprendemos, nos sentimos eternamente agradecidos y se nos cae una lágrima de emoción. ¿No es eso triste?

lunes, 19 de noviembre de 2007

CRÓNICAS DESDE CÁDIZ

Día 3. Llegada a Puerto Real

Me he vuelto a mudar. Esta vez tengo una habitación para mí sola: Un armario-nuevo, un escritorio-cajonera, una cama-plegable y un montón de estantes y cajones que rellenar. Pero hay dos pegas. La primera es que ahora no tengo con qué rellenarlo, pues vine con una mochila delante y la otra detrás (además de la bici y la muleta), así que llevé lo que me cupo. El resto de mis cosas están repartidas por dos pisos de Sevilla, el instituto donde trabajaba y cosas que me dejaría en casa en Barcelona. La otra pega es que el armario-nuevo es lo único que no se cae a trozos. La estantería-cómoda tiene los bajos podridos (candidiasis o algo así), y el segundo cajón se cae sobre el tercero, de manera que no se abre ninguno. La mesa-cajonera (o escritorio estilo Victoriano por lo menos), es la segunda sospechosa del flaire de la habitación a mueble viejo-húmedo, la primera sospechosa es la estantería-cómoda.
Como decoración tengo un cable que entra por la puerta, atraviesa la pared por detrás del armario-cómoda por el rodapiés y en un momento dado sube la pared medio metro, se separa de la pared cual liana caída y cae otro medio metro. Y todo pintadito de blanco. La otra parte de la decoración son unos puntitos grises spore-releasing en la pared, unos en la ventana y otros en la pared que da al baño.
Los armarios de la cocina tienen tiradores de metal que tienen color verde biofilm y el interruptor del pasillo, así como un par de enchufes más, se cae al pulsarlo.
Los retretes y el lavabo pequeño gotean y la solución de la casera fue que no pagáramos el recibo del agua en lugar de arreglarlo.
Sin embargo en este piso hay muchos colchones, con los que se da la bienvenida a las visitas (si os sigue apeteciendo). El olor a humedad se combate con incienso y velas, las manchitas de las paredes pintando con tip-ex. No necesito abrir dos de los 3 cajones de la estantería-cómoda, pues tengo suficiente con el primero y ya tengo proyectos para decorar el cable. La parte central de los tiradores de la cocina no están verdes y tengo todo un armarito para mis compras. En realidad sí hay agua caliente, sólo que no me avisaron que cerraban la bombona por la noche. Y que llevemos desde mi primer día sin papel de culo se puede arreglar con servilletas de papel.
Así que quien me conozca un poco sabrá que en realidad estoy contenta con el piso. Es habitable pero totalmente imperfecto, lo que me dará material para escribir un rato, y a falta de monbús... (aunque me han dicho que el tranporte público aquí es patético, ya tengo ganas de conocerlo para poder comparar).
Todas las veces que he preguntado qué hay para hacer por aquí me han respuesto con una pregunta: "¿Tienes coche?" Pero en realidad hay Campus Cinema, hay Parques naturales con tablas de ejercicios y merenderos a los que puedo ir andando desde casa o desde el trabajo, hay playas de la hostia para invierno y verano, hay conciertos de indie-pop nacional, fiestas universitarias, Carnaval de Cádiz, Ferias, voluntariados, teatro, curso de teatro, escuela de cine... Y más cosas que debo haber olvidado.
Todo está dentro de la Bahía de Cádiz, a pocos quilómetros de separación, pero que el tren te da ruta turística y el bus da más vuelta que ir de Sitges a San Pedro pasando por el aeropueto. Es decir, que con coche son 5 minutos y es maravilloso. Y hasta que me lo traiga y me ayudéis a traerlo, aprovecharé las ventajas de la bici, conoceré el transporte público y querré amigos Andreses por intereses.

lunes, 12 de noviembre de 2007

LO SOY, no me pongáis a prueba

Pedante, déspota, borde y todos los sinónimos que queráis encontrar, cuando recibo un forward que considero de subnormales reenviar (no los q se supone q son graciosos, los otros). El proceso es el siguiente:

-Recibo el correo.

-Si parece original o viene de alguien de quien no me espero, lo abro.

-La rabia interior me consume.

-Entro en un trance imparable.

-Escribo alguna burrada y le doy a enviar a todos.

-Sigo con mi vida normal mientras pierdo amigos.

Así que… por favor, no me pongáis a prueba que no tengo autocontrol.

Y ¿Escote O Culo?

Yo no quiero que me tachen de envidiosa, pero prefiero poco y que se note bien qué parte de la anatomía de la mujer es, sin ambigüedades.

martes, 6 de noviembre de 2007

OJOS Y ESCOTES

Y ahora voy a quejarme un poco. Porque estoy de buen humor.
Voy a plantear una pregunta. De esas que siempre sugiero que colaboréis con alguna respuesta o comentario y luego... bueno, luego escribe Nuria XD
Ahí va:
¿Cómo pueden algunos hablar con alguien, con una sola persona, y conseguir no mirarla en ningun momento a los ojos?
¿Harán ejercicios de entrenamiento frente al espejo?
Pues debe ser tan difícil como no mirar a un pedazo de escote de esos que se ponen nada más que para desconcentrar y probar la capacidad de control. Y no digo pedazo de paquete, porque eso ya queda en otro plano, más lejos. Y en principio el paquete no se lo ponen...

sábado, 3 de noviembre de 2007

Una noche no muy larga

Y es que ya estaba cansada de escuchar (¡ay si yo supiera oir como tantos que yo me sé!) sandeces similares a las que yo digo quizá, pero sin estar de humor.
Y bien se podría decir que pasó lo que pasó por no haberme esperado un poco más. Bien podría decirse que fue por no haberme llevado la bici. Así que el tema está empatado. En lugar de estar en un sitio aburrida estaba vagando cansada y machacándome el tobillo poco a poco.
Eso sí, al llegar, después de saludar a los que llegaron más cómoda y rápidamente que yo; baño de contraste.
Y un poquito de blogse. Porque entre todas las tontás que había pensado mientras renegaba hormonalmente cabreada, sabía que tenía que encender el ordenador para ello. Así que lo he encendido, sin poder ahora recordar qué quería hacer con él de manera tan urgente que no esperaría a mañana.
Lo mejor ha sido la obra de teatro. Hacía mucho (un par de años) que me apetecía ver una obra clásica de teatro. No monólogos, no alternativo, no experimental; clásico. Y esto ha sido lo más parecido. El dramatismo lo tenía igual, pero le falló el hilo argumental, pues es una mezcla de 3 obras clásicas juntas. Tres que son la misma: Don Juan Tenorio, pero de 3 autores diferentes: Molière, Zorrilla y Tirso.
Parece que la esencia del personaje de Don Juan viene a ser como propaganda divina. ¿O propaganda del malhechor? No sé si es un "luego te perdono porque soy tan bueno" o un "malhaz, que al final nos perdonan a todos", no me ha quedado muy claro.